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Regresando a lo básico, estas surgieron como páginas o plataformas de Internet donde puedes compartir todo tipo de información e interactuar con otros. Al principio solo se pensaba en abrir un perfil para conectar con tus conocidos, pero más adelante surgió un efecto llamado ‘red neuronal’ en el que luego de hacerlo con los allegados, también te encuentras con más personas con las que compartes intereses.
Esto, a su vez ha dado lugar a la creación de nuevas redes que hagan ese tipo de interacciones más rápidas. Por ejemplo, para 2003 existían únicamente las plataformas tipo blog como hi5 o My Space, donde era una comunicación más directa con el otro. En cambio, actualmente existe una amplia variedad con formatos distintos y algoritmos que te ayudan a ampliar tu círculo social con recomendaciones basadas en las cosas a las que les das 'like', tu edad, género, el lugar donde vives o las personalidades a las que sigues.
Este crecimiento también hizo que se convirtieran en una herramienta de mercadeo actual que puede ayudar al desarrollo y posicionamiento de marcas, llevando los anuncios justo hasta sus consumidores e impulsando las ventas.
Para lograr aprovechar esto en los emprendimientos, es necesario empezar por comprender también cuáles son las que existen y cómo funcionan. ¡Aquí te ayudaremos un poco con eso!
Según un estudio de Global Web Index de 2022 había 4.62 billones de usuarios registrados en las redes sociales. Esto significa que el alcance que podemos tener con ellas es inmenso, pero primero hay que identificar cuál es en la que más nos conviene invertir, según su enfoque, el cual conoceremos a continuación.
Redes sociales de contenido: Como su nombre lo dice, estas redes están enfocadas a presentar contenido nuevo que puede asociarse a las búsquedas de Google sobre los temas de interés o actualidad. Son las que más se utilizan y entre las más famosas de ellas se encuentran YouTube, Facebook, Instagram, Twitter, TikTok, Snapchat, Flickr, Vimeo y Pinterest.
Redes sociales de nicho: Están dirigidas a un público específico y aportan ahí herramientas, así como un networking sobre el trabajo. Por ejemplo, Goodreads que es para los amantes de la lectura o Behance que reúne a diseñadores.
Redes sociales para encontrar pareja: En estas el objetivo es claro desde el principio, lo que modifica el comportamiento de las personas pues no solo buscan ganar un 'Me Gusta' o aumentar seguidores, sino concretar un contacto frente a frente.
Redes sociales para buscar trabajo: Al igual que la anterior, tienen una meta clara y cuentan también con campañas para favorecer el crecimiento laboral, ayudando tanto a empleadores como a los que buscan trabajo.
Redes sociales de mensajería: A diferencia de las anteriores, no suelen sugerir conocidos ni tratan de crear un engagement o aumentar la popularidad, sino simplemente fomentan la comunicación. En el caso de los negocios son importantes porque permiten tener una conversación en tiempo real, aunque el cliente esté lejos del vendedor.
Redes sociales para evaluar y comparar servicios: Con la finalidad de asegurar una buena experiencia, estas plataformas dan a los compradores la posibilidad de calificar a las tiendas. También pueden servir para atraer nuevas compras con las reseñas confiables o puntuaciones positivas.
Lo que hacemos en nuestros perfiles se ha vuelto tan común que pareciera automático, pero la verdad es que, detrás de cada acción hay una intención que puede dividirse prácticamente en dos usos de las redes sociales: el personal y el de negocios.
El primero de ellos se refiere a todo lo que tiene que ver con nuestra vida privada como subir fotos, agregar nuevos amigos, expresar nuestras opiniones sobre algún tema, comentar posts de gente cercana, etc. Con estas acciones demostramos quiénes somos, cómo pensamos, o el círculo social al que pertenecemos, pero no generamos ninguna ganancia monetaria para los involucrados.
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Por otro lado, el uso de negocios implica apoyar directa o indirectamente a una empresa generando valor para ellos, ya sea monetario o como un reconocimiento social. Podría ser, en caso de que seas emprendedor, subir imágenes de tus prendas, publicarlas en los marketplaces, promocionar videos o contenido que funcione para atraer clientes, iniciar una dinámica para conocer a tus compradores, construir comunidad en línea, dirigir tráfico a tu web, obtener informes sobre consumo en la región, digitalizar negocios físicos, colaborar o conectar con otras marcas, mejorar la atención a clientes, etc.
Y, si el cliente eres tú, entonces las acciones de negocios que realizas es comprar, preguntar sobre el bien o servicio e incluso a veces darle like o compartir las publicaciones de una empresa, ya que esto le sirve para aumentar su presencia en internet y probablemente lo acerque a su objetivo de vender más.
Anteriormente una de las formas más efectivas de llegar a más personas era promocionarte en los medios de comunicación como radio, televisión o revistas, aunque para realmente ganarse a una persona nueva, lo mejor era la recomendación boca a boca. Sin embargo, ahora puedes tener ambas cosas al alcance de tu mano.
Esto se debe a que en las redes sociales puedes compartir el perfil de tu negocio y que este aparezca incluso a personas al otro lado del mundo y además, gracias a los comentarios e interacciones de los usuarios, también puedes tener recomendaciones que te ayuden a aumentar tu cartera de clientes.
Por otro lado, existe un temor sobre cómo hacer crecer exactamente tu presencia con esta herramienta y, la verdad, es que es más fácil de lo que parece. El paso más importante es abrir tu perfil en la plataforma que realmente vaya enfocada a tu público.
Por ejemplo, si lo que vendes es ropa, puedes usar Facebook aprovechando el Marketplace y también la ventaja de que ahí mismo estableces una comunicación directa con tu cliente y puedes recibir recomendaciones con las opiniones que los usuarios dejan en tu perfil. Pero también podrías aprovechar la estética de Instagram para ahí compartir algunas ideas de looks, ganar seguidores, impulsar tus ventas y fortalecer tu comunidad.
En cambio, si lo tuyo es un producto para adolescentes, TikTok tendría más fuerza al ser una plataforma usada principalmente por la comunidad joven; mientras que, si es un restaurante, también te ayudaría aparecer en Yelp u otra plataforma con reviews de los clientes.
Así que, no pierdas la oportunidad y comienza a aprovechar las redes sociales para que tu emprendimiento alcance su máximo potencial.