Hoy en día, y desde que la mujer se ha empoderado de su papel fundamental en la sociedad, el liderazgo es un rol esencial con el que nos destacamos cada vez más. Ser líder cobra mayor importancia en la vida de una mujer emprendedora, debido a que la fortaleza y consistencia que se necesita cuando se lleva un proyecto propio.
Por eso es importante identificar y potenciar las cualidades de liderazgo que tenemos como emprendedoras, para poder enfrentarnos a los obstáculos que se nos presenten en el camino.
Básicamente, el liderazgo se define como la capacidad de poder influir y comandar correctamente en un grupo de personas. Un líder es alguien que puede dar guía en las decisiones y actividades que se deben realizar.
Por esta razón, para ser una buena líder, es necesario tener un visión amplia y clara de las posibilidades que se presentan en el futuro del proyecto, asimismo y con base en lo anterior, es importante tener la capacidad de mejorar las actividades o procesos que puedan afectar al emprendimiento y saber dar un correcto direccionamiento a nuestros colaboradores para que el flujo de trabajo se mantenga estable y productivo.
Ahora, es importante definir la diferencia que existe entre ser emprendedora y líder. Una persona emprendedora tiene una idea concreta con un potencial de convertirla en un negocio y generar rentabilidad, lo cuál, no necesariamente significa que esta persona tenga desarrolladas las capacidades para ser buena líder.
Por otro lado, una persona líder es aquella que tiene facultades para dirigir de manera asertiva y empática a su equipo o compañeros, para llevar a cabo una meta concreta.
Una acción importante para ser una buena líder es revisar constantemente si el direccionamiento o lineamiento que le estás dando a tu grupo es realmente acertado. Muchas veces tenemos el sesgo de pensar que siempre tenemos la razón, lo cuál es imposible, no siempre podemos tenerla. Por eso, lo importante es saber cómo reaccionamos cuando alguien más nos hace ver que hemos cometido un error y de qué manera estamos dispuestas a repararlo o generar un nuevo direccionamiento.
Una líder y una emprendedora tienen mucho en común, por esto debemos resaltar en nosotras las cualidades de la responsabilidad, el compromiso, la empatía y todas las demás, de esa manera podemos convertimos en excelentes líderes emprendedoras, tanto de de nuestros proyectos como de nuestros grupos de apoyo.
¿Te consideras una líder emprendedora? Únete a más mujeres como tú. Llegó el momento de invertir ti, en tu crecimiento, y en tu comunidad. Llegó el momento de convertirte en una JETA.